Brightcove permite a los editores transmitir contenidos HD a la web. Pero debe asegurarse de codificar correctamente sus archivos de origen para aprovechar nuestras funciones de transmisión de secuencias de alta calidad. Para aquellos de nosotros que pensamos que "4:2:2 pulldown" suena como un idioma extranjero, es útil tener una explicación sencilla de cómo transmitir secuencias de vídeo de alta definición real.
Paso 1: Saber cómo funciona
Brightcove utiliza tecnología de secuencias con múltiples tasas de bits para ofrecer a los espectadores la mejor calidad de vídeo que su velocidad de Internet pueda soportar. Esto significa que creamos hasta seis variantes de representación de su vídeo con distintas resoluciones y velocidades de bits para una amplia variedad de conexiones a Internet, desde las rapidísimas líneas de oficina T3 hasta las conexiones móviles 3G, que a veces son deficientes. Nuestros reproductores de vídeo detectan la velocidad de Internet de los espectadores y les ofrecen la variante de representación adecuada.
Si desea utilizar la configuración predeterminada de Brightcove, simplemente cargue un archivo con la resolución y la tasa de bits más altas que tenga. La configuración predeterminada admite casi todos los códecs y contenedores de vídeo que se utilizan hoy en día, y la calidad máxima será de unos respetables 1280×960 (1280×720 para formatos 16:9) a unos 1,8 Mbps. Dicho esto, si está dispuesto a seguir algunos pasos adicionales, podrá distribuir contenidos de vídeo de alta definición real a través de Brightcove.
Paso 2: Cargar en H.264 y conservar el archivo fuente como una variante de representación
Dado que el proceso de transcodificación de Brightcove limita la reproducción de máxima calidad a 1280×960 a 1,8 Mbps, la clave para exprimir la mejor calidad posible de Brightcove es cargar el vídeo en un formato que podamos entregar a través de nuestros reproductores sin necesidad de transcodificación. Este formato es h.264.
El vídeo H.264 puede reproducirse en PC, dispositivos iOS y dispositivos Android. Dada su amplia compatibilidad entre dispositivos y sistemas operativos, es el formato de vídeo preferido de Brightcove. Como tal, Brightcove ofrece la opción de conservar una fuente H.264 y añadirla a la lista de variantes de representación disponibles del vídeo. El resultado final son las seis variantes de representación predeterminadas de Brightcove, además de su archivo fuente tal y como lo codificó en su máquina.
Paso 3: Codifique su archivo fuente en HD apto para la Web
Las consideraciones clave a la hora de codificar un vídeo para Brightcove son la calidad y la accesibilidad de la reproducción. No hay ninguna razón para incluir una variante de representación de origen de 10 Mbps cuando pocos usuarios finales, si es que hay alguno, tendrán velocidades de Internet suficientes para transmitir vídeo de 10 Mbps. Del mismo modo, un archivo fuente de 2 Mbps será prácticamente indistinguible de la variante de representación de 1,8 Mbps de Brightcove.
Los contenidos de vídeo a 1920×1080 requieren velocidades de bits excepcionalmente altas (a partir de 6-8 Mbps) para mostrarse con claridad, por lo que es mejor utilizar una resolución de 1280×960 o 1280×720 para los vídeos. La mayoría de los espectadores en pantallas de menos de 35″ no notarán la diferencia.
Por último, tienes que decidir la tasa de bits de codificación. Sugerimos una entre 3 y 6 Mbps. A qué lado de ese intervalo te inclines dependerá de si prefieres sacrificar un poco de calidad a cambio de una mayor accesibilidad o viceversa. Recuerda lo siguiente: Si un espectador no dispone de una conexión a Internet lo suficientemente potente para ver su variante de representación fuente, no es el fin del mundo. Brightcove podrá servirles una de las variantes de representación inferiores creadas por nuestro motor de codificación.